EL DÍA DESPUÉS

            Las recientes elecciones han tenido resultados inesperados para los tres candidatos que sumaron los votos mayoritarios.

            Javier Milei, con notable perfomance en la totalidad del país superó con creces sus propias expectativas y las dos coaliciones (oficialista y opositora) vieron diezmados sus caudales en forma transversal al perder adherentes en los sectores medios y bajos, en forma sorpresiva y sorprendente para ambos sectores.

            Indudablemente, las sucesivas elecciones provinciales no adelantaron, por primar cuestiones de naturaleza local, el fenómeno de bronca y hartazgo que capitaliza el inefable personaje libertario.

            La reflexión de los tres tercios que adelantara Cristina tuvo un impacto concreto, pero agravado por un cuarto tercio sobre el universo de votantes que se constituye por la franja que se abstuvo de concurrir a emitir el sufragio.

            Este espacio será objeto de especial atención y prédica por la necesidad imperiosa de sumar en dichas aguas.

            La lectura del fenómeno es muy sencilla y aparece de manera clara.

            El gobierno, en su peor momento, con un Ministro de Economía que fracasa sistemáticamente en ordenar las variables más sensibles de la Economía no podía aspirar a otro resultado que no fuera una derrota digna.

            La principal oposición enfrentada en una dura, ríspida y tensa disputa interna, no hizo otra cosa que demostrar el interés corporativo de liderar el espacio que suponían mayoritario.

            El ciudadano común, decepcionado por unos y otros, corresponsables del Estado General de La Nación, ya que comparten gestiones equívocas y endeudamientos que demuestran impotencia e impericia, tomó la iniciativa para hacer valer su enojo y rechazó a los responsables de tanta penuria.

            La recorrida por el lugar de los festejos del campamento de Milei permitió vislumbrar un universo de gente muy joven y entusiasta.

            La gente mayor probablemente piensa que estos jóvenes que votan a este singular personaje no entienden lo que puede llegar a pasar con posturas tan extremas, pero en todo caso las respuestas de los jóvenes tendrían como reflexiones que Ustedes vienen votando hace 40 años a estos políticos y así estamos como estamos.

            Asumen el riesgo con quién les propone un liberalismo con el hombre como protagonista y el libre juego de una economía de mercado, sin interferencia estatal.

            Este proyecto se enfrenta a lo que ofrecen las dos coaliciones que han fracasado sistemáticamente y en forma sucesiva.

            El contexto era sumamente propicio para tomar el riesgo.

            Es la primera vez en la historia, luego de la organización nacional y los primeros años de vida independiente, con el interregno del gobierno de Carlos Menem, que aparece un proyecto político liberal con futuro y proyección, en forma independiente y desvinculado de los partidos políticos tradicionales.

Las anteriores alternativas de dicho cuño nunca tuvieron consistencia electoral y sus cuadros terminaron cooptados y sumados a la gestión de Carlos Menem.

            La invención de Massa no alcanza para que su esposa pueda ganar en el pago chico y su contrincante, aún con boleta limitada, por la prohibición de portar la presidencial de Massa, la derrota sin miramientos.

            Santa Cruz, cuna del proyecto kirchnerista, cambia de signo y como nunca la distribución de los gobiernos provinciales se empareja, con efectos ciertos en la representación del Senado.

            El daño al entramado político clásico de la Argentina está hecho.

            La elección de octubre es distinta pero también muy diferente el marco en el cual se llevará a cabo.

            En los siguientes dos meses Milei tendrá que rendir exámenes de estabilidad, equilibrio emocional, responsabilidad y certezas para seguir sumando en su pecera en pos de la escalada final.

            El candidato triunfante permite revisar las conductas y actitudes de toda la clase política.

            Es el centro de la escena y el adversario a vencer. 

            Las coaliciones supuestamente mayoritarias están a un paso de quedar afuera en el ballotage.

Cualquiera de ellas se encuentra al borde del infortunio más temido.

            Con quién construirá Massa sus nuevas mayorías, mientras debe atender al plan que le fuera entregado y anunciado por el “amigo del Papa” en el discurso de adhesión.

            Siempre el peronismo ha perdido votos luego de las PASO, circunstancia que dificulta aún más la tarea de recomposición.

            La coalición opositora debe reflexionar en torno al mensaje para recuperar adhesiones perdidas, sumar indecisos y ausentes.

            Hay una variable de la cual tendrán que tener mucho cuidado: esto es el voto vergonzoso histórico que favorecía a Menem cuando muchos decían que no lo habían votado pero los números abultaban en su favor.

            Los jóvenes pueden embarcar a los padres en esta nueva aventura.

            La votación deja una gran enseñanza ya que representa de manera legítima el sentimiento, la bronca, el hartazgo y el enojo de gran parte de la población con la dirigencia política tradicional.