HIJOS PRESIDENCIALES: VICTIMAS DE LOS NEGOCIOS DE SUS PADRES 

La Justicia acaba de declarar la quiebra de la Empresa Correo Argentino S.A. en el marco de un Concurso de Acreedores iniciado por la firma en el año 2001.

Menuda “Pica en Flandes” del fiel escudero Carlos Zannini, quién, con paciencia Tibetana, tejió las redes para arribar a esta sentencia, rechazando sistemáticamente todas las ofertas presentadas, por la concursada, para cancelar la deuda, en su condición de Procurador General del Tesoro, acreedor principal de la deudora fallida.

Advertido, Mauricio, salió a denunciar la persecución familiar, ya que la sentencia viene con adicionales gravosos, aplicando la extensión del quebranto al holding controlador, zarandeando a la nave insignia Socma y sus responsables, para que afronten las deudas y los problemas acumulados.

Socma es la matriz de los negocios familiares y registra entre sus accionistas a los hijos de Mauricio.

Curioso entendimiento histórico de Néstor, Cristina y Mauricio: incorporar a los entramados societarios de los negocios, los hijos adolescentes.

Las sociedades hoteleras, tienen en sus directorios a Máximo y Florencia, con la fatídica exposición actual en las causas penales de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito.

Las desventuras penales de Macri, son persistentes en orden a algunas licencias y condonación de deudas, de la empresa familiar, en los tiempos que ejercía la Presidencia.

Los padres presidenciales, curtidos en lides y mil batallas, disponen de estoicidad espartana para afrontar las idas y las vueltas de la disputa política y los negocios vinculados con el ejercicio del poder.

Los hijos, partícipes necesarios por el autoritarismo y el ingenio paterno, desconocen los vericuetos de la ingeniería societaria y el manejo empresario.

Son rehenes y víctimas de sus propios padres.

Cristina y Mauricio quedan igualados.

Empate técnico, entre las causas personales como Presidentes y las desventuras de los hijos arrastrados por las decisiones paternas.

Probablemente tengan tiempo y oportunidad para algún encuentro amistoso que les permita acordar las condiciones de ambos retiros honrosos.

Una postal singular de un empresario exitoso, breve pero ilustrativa de la capacidad de adaptación, según los cambios de los rumbos políticos.

Franco Macri obtiene la concesión de Encotesa en el año 1997 y la mantiene hasta el 2003.

En 2001, ante las zozobras de distinta especie, inicia el Concurso Preventivo de Acreedores que a los 20 años de trámite lleva a la empresa a la quiebra.

Cuando Néstor le rescinde el contrato de la concesión (2003) por falta de pago del canon, inmediatamente acometió una nueva empresa: gestor directo de los negocios en China del gobierno que le mutilaba el contrato.

Los desprevenidos pueden revisar sus declaraciones elogiosas de la Cámpora, calificando a sus integrantes como buenos muchachos, pletóricos en ideas modernas.

Las cuestiones legales las entregó a sus abogados y él inició los negocios con China, calificado eje de la geopolítica kirchnerista.

No tuvo tiempo para lágrimas e inmediatamente advirtió el cambio de época y los fructíferos emprendimientos con el gigante asiático.

Genio y figura que no se detuvo en pequeñas circunstancias, siempre atento y vigilante a los cambios.

Firme combatiente de las novedosas batallas comerciales.

El Correo fue un fracaso mal resuelto, abandonado por mundos más provechosos.

A la pérdida económica se suma el grave error de la ausencia del cierre definitivo de la sangría.

Esquivos e insuficientes los ofrecimientos monetarios, fueron el preludio de un final lógico y acorde a los errores y apegos de bolsillo.

La hostilidad actual contra la empresa familiar es una situación largamente anunciada y prevista por las mentes más descuidadas y desatentas.

Cristina y Mauricio tienen hoy, necesariamente, un espacio común de adversidades recíprocas.

Sin buenos y malos o blancos y negros.

Ambos han pisoteado el barro y no podrán salir limpios e inmaculados.

El resto de la clase política encuentra una inmejorable chance de aplaudir sin reparos, el apartamiento “voluntario” de ambos, en sintonía y a la par, de la escena pública.

Con rigor técnico, ha fracasado el procedimiento de salvataje, que incluye conductas llamativas en la gestión estatal, antes y durante sus presidencias.

Las últimas gestiones de Mauricio, no lograron consumar la oferta del Correo, aprobada por sus funcionarios, pero cuestionada por la Fiscal de la Cámara Comercial, que impidió la homologación del Arreglo.

Por lo tanto, el acuerdo no se encuentra vigente, y los despachos de los Camaristas, son testigos de diferencias, trasiegan expedientes, influyentes, sin obtener algún consenso que permita la viabilidad homologatoria.

El actual Procurador General del Tesoro, modifica sustancialmente el criterio de su antecesor.

Zannini porta intransigencia, califica de abusiva e insuficiente la propuesta empresaria y reclama la bancarrota.

La consigna es la quiebra y la extensión de la responsabilidad contra la empresa controlante y sus accionistas.

Primer capítulo con franco triunfo de Cristina y se despabila un horizonte oscuro para los descuidados, desconcertados y anonadados familiares de Mauricio.

Sin gastar tiempo en lamentos, los allegados mas íntimos inician conversaciones.

Los próximos capítulos prometen novedades picantes para la suerte en ambos campamentos.

Todos esconden picardías.

Desventuras de los hijos producidas por los negocios de los padres.

Ambiciones sin límites y confusiones familiares.